El Día Internacional de la Diversidad Biológica, tiene como objetivo crear conciencia de la importancia que tiene la
biodiversidad para los seres humanos, por ende, es necesario cuidarla y
preservarla para las futuras generaciones.
Se entiende por biodiversidad la
amplia variedad de plantas, animales y microorganismos existentes, pero también
incluye las diferencias genéticas dentro de cada especie -por ejemplo, entre
las variedades de cultivos y las razas de ganado-, así como la variedad de
ecosistemas (lagos, bosques, desiertos, campos agrarios,...) que albergan
múltiples interacciones entre sus miembros (humanos, plantas, animales) y su
entorno (agua, aire, suelo...)
Es la combinación de múltiples formas de
vida, cuyas interacciones con el entorno lo que fundamenta el sustento del planeta.
Los recursos biológicos son los pilares que sustentan las
civilizaciones. Los peces proporcionan el 20% de las proteínas
animales a unos 3 000 millones de personas. Más del 80% de la dieta humana está
compuesta por las plantas. Aproximadamente, el 80% de las personas que viven en
las zonas rurales de los países en desarrollo, dependen de medicamentos
tradicionales basados en plantas para la atención básica de la salud.
El Convenio sobre la
Diversidad Biológica
Este valioso instrumento
internacional tiene como objetivo la protección, cuidado y conservación de la
diversidad biológica de todo el planeta. Fue firmado por 196 países en la ONU en 1992.
Busca que la especie humana sea capaz
de vivir en un mundo mucho más sostenible, con justicia y equidad, donde la
distribución de los recursos naturales pueda llegar a un mayor número de
personas, que lamentablemente hoy sufren de hambre, miseria y muerte por falta
de ellos. Se estima que entre 30 a 300 especies desaparecen diariamente, lo cual es una situación altamente devastadora, considerando que es la humanidad la que acelera la extinción, que se calcula es una aceleración de 100 veces con respecto al ritmo natural.
Solo la aplicación de los acuerdos en los distintos
paìses, para la adecuación de actividades, en equilibrio y protección de la flora y fauna hará la diferencia para que, a la larga, el cuido de la vida se transforme en una realidad posible.